Cuando se habla de clásicos de la literatura, buena parte de las personas seguramente dirige su mirada hacia aquellas lecturas de siglos pasados, donde existen creaciones que han marcado pauta y son dignas de descubrir, siendo una de estas Ulises.
Ulises fue escrita por el irlandés James Joyce en el año 1922 y para muchos especialistas es una de las novelas más influyentes, destacadas y discutidas del siglo XX.
La autora, académica e intelectual Mikita Brottman dice sobre esta obra que “Hay muchas razones por las cuales la gente cree que hay libros que ‘deben’ leerse” y agrega que “pero sospecho que (…) pueden resumirse en inseguridad intelectual, esnobismo, temores residuales de clase, egoísmo y una especie de folclore supersticioso arraigado en la tradición”.
Sin embargo, no todos se toman la tarea de leer esta obra pues tiene fama de ser una lectura densa, para algunos insoportable e ilegible, pero en contraparte se puede decir que también guarda en sus páginas un desafío interesante.
Además, Ulises tiene la capacidad de ser la novela que rompe todos los esquemas, que se sale de ese cuadro en el que muchas estuvieron enmarcadas y presenta una narrativa fuera de lo común.
Por si fuera poco y en un dato interesante, se debe indicar que esta obra guarda relación con la Odisea de Homero y es que según el análisis de Xavier A. Carbonell “Ulises está construido sobre referencias, a veces muy humorísticas, a la obra del poeta griego y de muchos otros escritores. Por ejemplo, hay un capítulo que relaciona a unas mujeres que parlotean sandeces con las famosas y fatales sirenas griegas”.
Si decides leer este libro, se sugiere que no se tome como referencia el argumento del mismo pues simplemente se podría decir que se basa en un día en la vida de dos de sus personajes: el joven Stephen Dedalus y Leopold Bloom, un judío a la que su esposa Molly, le es infiel.
En un crudo análisis de Kiko Amat para El País, este afirma que “esta novela es como un museo de expresionismo abstracto: necesitas al guía susurrando en tu oreja todo el rato, de otro modo solo ves lienzos con vomitonas”.
Así pues, que con voces a favor y en contra, no queda duda de que Ulises es una de las obras más debatidas del siglo XX y que no ha pasado por debajo de la mesa, que una persona soporte leerlo ya es otro tema.
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